No se puede hacer nada en contra del destino. No se puede hacer nada si al mínimo movimiento puedes destrozar lo que te ha costado forjar durante tanto tiempo.
Ni siquiera sé qué sentir.
No se al punto que he de mirar para que el vacío al que miro, se transforme en oscuridad ante mis ojos y me nuble completamente todo.
Quizá debería reírme por todos los acontecimientos. Contentarme por lo que ya sabía que iba a pasar. Puede que me haya quitado la venda demasiado tarde, o puede que el nudo que la ataba no se haya deshecho hasta ahora. Me lo deberían haber quitado antes. Me tenían que haber advertido de que en el momento en el que me lo quitaran, la claridad idealizada se transformaría en oscuridad. En nada.
Puede incluso que yo misma prefiera vivir con una venda, pero ya no encuentro el pañuelo con el que me tapaba.
Aunque no necesito que nadie me la quite, si no es necesario, me conformo simplemente con que me guíen
4 me han dicho...:
No te machaques con el debería, o con como no lo vi... todos tenemos momentos de ceguera, pero si se cayó la venda es el momento de enfrentarse a la realidad.
A todos nos llega ese día en el que alguien de golpe enciende la luz, y el exceso de claridad nos ciega y nos damos cuenta de que la varita mágica de princesa dejó de funcionar tras caerse en el último charco...
Sin embargo, el tiempo la deja reposar y una vez seca del todo. Desprende la magia que todos hemos ansiado, solo que de un modo diferente.
No te centres sólo en lo malo.
Existen tambien detalles que todo lo valen.
Mua
Tienes un regalito en mi blog, pasate
Pst. pst...
Señorita, que no vale enganchar a nuevos lectores y no escribir nada más. Que me muero de ganas por reelerte.
Espero que todo vaya bien.
Mua.
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